Información vía El Universal
La madre de María Fernanda Michua Gantus, estudiante cuya muerte detonó un movimiento estudiantil en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), comunicó por medio de su cuenta de Twitter que su hija murió de un ataque prolongado de epilepsia acontecido tras salir llorando de un examen de derecho donde fue humillada por el profesor, y no por haberse suicidado.
A una semana de haber muerto su hija, su madre habla del tratamiento mediático en torno a la muerte de su hija que acusa de “inexacto, banal y totalmente lejano a lo que mi hija pensaba y vivía”. Esto haciendo referencia a que la información inicial difundida por los medios en la que se señaló que la joven se había suicidado.
La mujer aclaró que Fernanda sufría de ataques epilépticos y depresivos combinados con fuertes migrañas, una condición que mantenía oculta par evitar que fuera tratada con menos rigor que sus compañeros. Por esta razón, la joven se encontraba medicada constantemente.
La causa de muerte fue un prolongado ataque de epilepsia generado por los altos niveles de estrés académico al que estaba sometida y a la reciente muerte de su abuela, pero, sobre todo, el detonante de dicho episodio epiléptico fue la humillación que sufrió durante un examen de derecho.
Lectura Recomendada: Confirman asesinato de dos alumnos del Tec de Monterrey; uno era de Monclova
Explicó que su hija decidió estudiar en el ITAM por su alto nivel de exigencia que le permitía acercarse al objetivo de llegar a ser la mejor. Destacó que el enojo permanente que expresaba su hija no era hacia la institución, sino hacia la forma burlona y humillante en la que los maestros atacaban a los alumnos.
La muerte de Fernanda detonó un movimiento estudiantil que denunció la alta presión académica y las constantes humillaciones por parte de los profesores. De acuerdo con lo que informaron los propios estudiantes, este tipo de acciones han generado problemas psicoemocionales que ya han cobrado la vida de otros tres compañeros.
"Mi hija detestaba donde la empatía y la bondad de dichos profesores era inexistente, al punto que en el último día de su vida Fernanda salió de un examen llorando de un examen de derecho por la humillación recibida por uno de sus maestros. Esta situación fue detonante para el ataque que sufrió mi hija", declaró su madre.
Aseguró que no tomaría en cuenta aquellos comentarios que tildaron a su hija de “fifí, rica, mimada e incapaz de soportar la presión” y destacó que su hija siempre fue una mujer que se esforzaba por salir adelante.