"Estrategia para derrocar a Maduro ya está en marcha", admite Mike Pompeo
En una reciente entrevista con el canal de televisión Caracol, el secretario de Estado estadounidense Mike Pompeo afirmó que su misión es que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, se vaya y que haya elecciones en Venezuela.
Pompeo participó el pasado lunes en la III Cumbre Hemisférica contra el Terrorismo, que se llevó a cabo en Bogotá, Colombia, y que contó con la asistencia del diputado opositor venezolano Juan Guaidó, quien, pese a que aún se encuentra en funciones Nicolás Maduro, se autoproclamó presidente de Venezuela en enero del año pasado.
"Estamos en este proyecto que va a dar un resultado: Maduro se irá y la gente de Venezuela tendrá elecciones libres y justas", aseveró en la entrevista publicada en el medio colombiano.
El secretario de Estado estadounidense manifestó que su Gobierno, que no reconoce a Maduro como presidente de Venezuela, se encuentra en conversaciones con "toda Sudamérica, Centroamérica, los países europeos y otros alrededor del mundo", con la finalidad de unir esfuerzos para deponer al mandatario venezolano.
En la Cumbre contra el Terrorismo, tanto el presidente colombiano, Iván Duque, como Pompeo coincidieron en que Caracas financiaba y daba albergue a grupos terroristas en su territorio.
Al ser consultado por la estrategia, considerada como un "fracaso" que estaría aplicando su país para deponer al mandatario venezolano, el jefe de la diplomacia estadounidense aseguró que estaba en marcha.
"¿Sabe?, lo que yo escucho es que la estrategia está funcionando", dijo.
Pompeo ratificó que su país ha puesto "duras sanciones sobre el régimen haciéndoles más difícil que puedan hacerle daño al pueblo venezolano". Al respecto, el gobierno venezolano afirma que las medidas punitivas han afectado a la población. Maduro recientemente afirmó que el bloqueo de EE.UU. contra Venezuela ha generado pérdidas por el orden de los 40.000 millones de dólares.
En contraste el canciller venezolano, Jorge Arreaza, informó recientemente sobre un documento distribuido por las embajadas de EEUU en el mundo con la finalidad de coaccionar a sus gobiernos para que apoyen un Gobierno de transición en Venezuela a través de la Asamblea Nacional, de mayoría derechista y opositora.
Las declaraciones de Pompeo provocaron la reacción de la canciller rusa, María Zájarova, quien declaró que Estados Unidos "nunca ha abandonado la táctica de injerencia en los asuntos de países soberanos y la política de cambio de regímenes".
En días pasados medios internacionales revelaron que, de acuerdo a un informe en el portal oficial de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglés), desde 2017 este organismo ha pagado 467 millones de dólares a los opositores del gobierno de Nicolás Maduro, bajo el esquema de asistencia humanitaria.
El documento expresa que tras un acuerdo firmado en octubre de 2019, la USAID ha comprometido 128 millones de dólares para “ayudar” al líder opositor Guaidó y también para la Asamblea Nacional con el objetivo del “desarrollo de planes para recuperar la economía e implementar servicios sociales durante una transición a la democracia". Asimismo la agencia estadounidense revela asignar dinero para “compensación, costos de viaje y otros gastos para algunos asesores técnicos de la Asamblea Nacional y la administración interina de Guaidó a través de fondos de asistencia”.
En el texto, la USAID subraya que no proporciona fondos directamente a los miembros electos de la AN venezolana y a los funcionarios de Juan Guaidó, aunque reconoce que se otorgan los fondos a organizaciones privadas a través de contratos, donaciones o acuerdos de cooperación.
El presidente venezolano Nicolás Maduro dijo que Mike Pompeo "es un hombre que se autoengaña, que vive de la mentira". Sin embargo hace una semana, en entrevista con el diario The Washington Post, Maduro dijo estar listo para un diálogo con Estados Unidos y "sugirió que una bonanza podría estar esperando a compañías petroleras estadounidenses" en Venezuela, si el presidente estadounidense Donald Trump levanta sanciones y reinicia relaciones entre ambos países.
En tanto, a pesar de que pesa sobre él una restricción para salir de su nación, el diputado Juan Guaidó se encuentra en una gira por diferentes países de América Latina y Europa, donde se ha entrevistado con el primer ministro británico, Boris Johnson y anuncia un próximo encuentro con la cancillería española.
El tema Juan Guaidó mantiene dividida a la comunidad internacional. Ha sido reconocido por el secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), el Parlamento Europeo y los gobiernos de países como: Bolivia (desde Jeanine Añez), Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, España, Estados Unidos, Francia, Guatemala, Perú, Paraguay y Reino Unido. En cambio países como Nicaragua, Rusia, China, Irán y Turquía, no lo reconocen y mantienen su apoyo al gobierno de Nicolás Maduro. Los gobiernos de México, Uruguay y Argentina han optado por una postura neutral.