Cientos de personas migrantes están llegando a pie a la zona fronteriza de Coahuila, particularmente a Piedras Negras, pese al asedio por parte de las autoridades.
En videos y transmisiones en vivo, se pueden ver a grupos de personas migrantes, la mayoría de ellas de países centroamericanos, llegando a la frontera norte coahuilense para tratar de cruzar hacia Estados Unidos.
Muchas de las personas migrantes que están llegando a pie a la zona fronteriza no lo hicieron por falta de medios, sino porque el gobierno de Coahuila, junto con las autoridades migratorias, no les permitieron adquirir boletos de autobús de línea pese a que tienen papeles que acreditan su estancia legal en territorio mexicano.
Por toda la carretera federal número 57 que va hacia Piedras Negras, se pueden ver filas de personas migrantes caminando bajo los rayos del sol para llegar hasta su destino. Ni las temperaturas extremas, ni las condiciones de inseguridad son motivo suficiente para que las autoridades y las propias comisiones de derechos humanos salgan en ayuda de los viajeros.
Dentro del grupo de personas migrantes que están caminando hacia la zona fronteriza de Coahuila, destacó el caso de un viajero venezolano que, tras recorrer varios kilómetros a más de 40 grados centígrados de temperatura, simplemente se desplomó y tuvo que recibir asistencia médica e internamiento en un hospital.
Las condiciones de deshidratación y el propio desgaste de la caminata ponen en riesgo la vida de cientos de personas.
Pese a que el gobernador Miguel Riquelme prometió que se van a respetar los derechos humanos de las personas migrantes durante los operativos de revisión, la realidad, según videos y notas periodísticas que circulan en redes sociales, es que las redadas, ejecutadas, principalmente, por corporaciones municipales y estatales, tienen la intención de detener a los viajeros y remitirlos con la autoridad migratoria.
El convenio firmado entre Riquelme y Greg Abbot puntualiza que el gobierno de Coahuila tendrá la obligación de implementar las revisiones y los operativos que garanticen que ninguna persona migrante pueda cruzar su frontera para llegar hacia Estados Unidos.
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Se espera que en los próximos días se reúnan alrededor de 10 mil personas migrantes en la frontera coahuilense con la esperanza de ingresar a territorio norteamericano.
Cabe destacar que, en lo que, hasta el mes de mayo, 37 viajeros perdieron la vida en las aguas del Río Bravo dentro del estado de Coahuila.
