Liliana Leticia Ríos y su hija, Laura Valeria Ramos Ríos, fueron vistas por última vez el 7 de octubre de 2017. Por la desaparición de Laura Valeria, quien en ese entonces tenía un año y tres meses de nacida, no se ha girado una Alerta Amber por parte de las autoridades estatales.
Karla Ríos, tía de la menor y hermana de Liliana Leticia, convocó a una rueda de prensa para condenar la inacción de las instancias competentes en Coahuila y exigir se gire la Alerta para que el rostro de su sobrina pueda ser visibilizado en todo el país.
Con el apoyo y la asesoría del Centro de Derechos Humanos Fray Juan de Larios, Karla Ríos leyó un pronunciamiento en el que describió las conductas omisas de las autoridades estatales, en particular las que se encargan de la procuración de justicia.
"Cumple todos y cada uno de los requisitos que se necesitan (para la Alerta Amber), ser menor de 18 años, que exista información adecuada para hacer una ficha de búsqueda por alerta Amber y, la más importante, que se encuentre en riesgo inminente de sufrir daños graves a su integridad personal por motivos de ausencia, extravío, privación ilegal de la libertad o cualquier circunstancia en las que se haya cometido un ilícito ocurrido en territorio nacional. Como pueden ver, Laura Valeria cumple con cada uno de los requisitos de la Alerta Amber para poder solicitarla", expresó Karla Ríos.
En el pronunciamiento, la familiar de las víctimas señaló particularmente a la jueza penal Karla Lizbeth Martínez Medina por revictimizar a su sobrina.
"El pasado 10 de octubre del presente año la jueza penal Karla Lizbeth Martínez Medina sostuvo que no ser necesaria la activación de una Alerta Amber por mi sobrina Laura Valeria Ramos Ríos", denunció.
Por otro lado, Karla Ríos también condenó la actuación omisa de la Fiscalía de Personas Desaparecidas del Estado de Coahuila, ya que no ha emprendido acciones para localizar a su hermana, Liliana Leticia Ríos, quien fue vista por última vez, junto con su hija, en el fraccionamiento Latinoamericano, al oriente de la ciudad de Torreón.
"La Fiscalía de Personas Desaparecidas también se ha negado a colaborar en la búsqueda de mi hermana Liliana, escudándose en que ellos no descartan la probabilidad de que mi hermana se haya ido por su propia voluntad, aún y cuando la camioneta en la que viajaba no ha sido localizada, la cual era pertenencia de la pareja sentimental de mi hermana, la cual era funcionario público".
La pareja de su hermana, quien fue dado de baja de la función pública dos semanas después de la desaparición, no ha sido contemplada como presunto sospechoso ni lo han involucrado en las investigaciones.
"Habiendo tantas inconsistencias en este caso, exijo a Fiscalía hagan su trabajo, esclarezcan los hechos y reconozcan a mi hermana y a mi sobrina Laura Valeria como víctimas de desaparición forzada, uniéndose a la lista interminable de mujeres desaparecidas en La Laguna", comunicó Karla Ríos.
El sistema Alerta Amber nació en Dallas, Texas, como un convenio de colaboración entre medios de comunicación y la policía local para ayudar a encontrar niños y niñas sustraídas. Amber es un acrónico de America´s Missing: Broadcast Emergency Response y fue creado como un legado para Amber Hagerman, niña de 9 años de edad que fue sustraída mientras montaba su bicicleta en Arlington, Texas y posteriormente asesinada.
Con el paso del tiempo, a fines de 2001, solo cuatro entidades de Estados Unidos habían adoptado la Alerta Amber como protocolo para localizar de manera rápida y expedida a menores de edad desaparecidos.
Finalmente, fue hasta el 26 de mayo de 2014 cuando se realizó el lanzamiento formal del sitio web Alerta Amber en México, durante el foro que llevó el mismo nombre en la capital del país.
Lucía Reza, representante del Centro de Derechos Humanos Fray Juan de Larios explicó que, en el caso de la desaparición de la menor Laura Valeria Ramos Ríos, el caso cumple todos los requisitos y características para que se emita una Alerta Amber, sin embargo, dijo que no se han respetado los derechos de la víctima.
"Todos los niños, niñas y adolescentes en calidad de desaparecidos, mientras subsista su no localización y aún se encuentren en estado de desaparición, siempre estarán en riesgo inminente por la cual, merecen, la máxima protección de la ley sobre todo, de los juzgados penales", indicó la abogada.